Cuentan que sintió vacÍo...
vacío por abandono, por nostalgia, por desilusión, por olvido.
Vacío que llenaba su alma de vacío,
sin que hallara la manera de desterrarlo.
Cuentan que sintió frío...
frío por ausencia, por soledad, por no encontrar nada cuando sí lo esperaba.
Frío que adormecía sus sentidos,
su percepción, su alegría y sus ganas de sonreir.
Cuentan que ahora anda en un cruce de caminos sin saber cual escoger,
solo quiere tener fuerzas para lograr espantar al vacío y al frío,
porque duelen demasiado y no la dejan respirar.
Sabe que ambos, tanto el frío como el vacío son malos compañeros de viaje,
sabe que no puede vivir sin calor en el alma, sin sonrisas, sin te quieros.
Está cansada..., sola y muerta de frío.
Y no quiere pensar mas, ya lo pensará mañana.