lunes, 10 de agosto de 2009

Globos para tí...


En los globos rojos guardaremos la pasión, el erotismo del que van cargadas nuestras miradas, los besos, estos últimos como si se tratara de caramelos...se te ocurre algo más? ( a mi sí, despues te lo cuento bajito al oido)
En los de color verde guardaré las ilusiones creadas día a día, compartidas contigo y por las que aún estoy dispuesta a luchar en esta locura a la que llaman amor.
En los globos azules voy a guardar, si te parece bien, la complicidad, la admiración que muchas veces siento por tí, la lectura compartida, la ternura, el cariño sin medida...y aún queda sitio para lo que tú decidas.
En los amarillos meteré todas las risas a carcajadas, las situaciones graciosas y a veces ridículas que nos ha tocado compartir, tipo Almodovar, las sonrisas, las miradas...
Para los de color morado he reservado los sueños, esos de los que no me quiero despertar salvo que sea para encontrarte a mi lado, para fundirnos en un abrazo, comernos a besos y querernos sin descanso.
Y no te preocupes si se explotan los globos, eso no es malo, es señal de que andan bastante llenos y que podremos llenar otros nuevos.

martes, 4 de agosto de 2009

Bebiéndote,...comiéndome...


En el silencio solo se escuchaba la respiración de él y el presentimiento de que se iba acercando cada vez más.
Ella se quedó quieta, las piernas le temblaban sin poder evitarlo, notó su respiración en la nuca, le sobrevino un escalofrío que se hizo aún mayor al sentir como una de sus manos ascendía por su cuello hasta que dos de sus dedos alcanzaron su boca para juguetear con su lengua.
Quiso girarse pero él se lo impidió sujetándola con la otra mano, aproximándola hasta su sexo, acercandose hasta apretar su miembro a las nalgas de ella.
Sitió calor, comenzó a pensar en lo que sucedería si alguien los descubría, recordó que estaban en un baño público, ella sabía que él la seguiría...y justo cuando se estaba lavando las manos fue cuando apareció...misterioso, callado, cercano a pesar de todo.
El riesgo a ser descubiertos hacía la escena aún mas excitante...
Él se había desabrochado el cinturón y los botones de su pantalón, mientra ella permanecía con la mini levantada, sus piernas se extendian, largas sobre los zapatos de tacón, color miel.
Apoyó sus manos en el lavabo, siguiendo los movimientos de él. Antes de darse cuenta sus piernas estaban separadas ofreciendo su sexo. Sintió cómo la penetraba con ansia, despacio y fuerte, con movimientos acertados en cada golpe...
No pudo resistir, tenía tantas ganas de él, que el orgasmo la sorprendió a los pocos minutos...
Despues, la hizo girarse y sentarse sobre un banquito que había en un lado...le pidió su lengua y no dudó en dársela, saboreó, chupó y recogió todo el jugo...casi de inmediato le besó, suave, ambos calmados...saciados.
Sonó la puerta, alguien entraba...y se despertó. Miró a su lado y sonrió, al tiempo que un suspiro salía de sus labios. Te quiero...he soñado contigo y te quiero. Que rico sueño!